Una empresa sudafricana, dedicada al cultivo de cannabis con fines medicinales, necesitaba un sistema de seguimiento de plantas que se ajustara a las estrictas directrices para obtener una licencia de exportación.

¿Cómo se ha utilizado la RFID?

Se utilizó un tag específico para este tipo de entorno, el Vivary Tag, colocado en las plantas de Cannabis, que adquieren así una identificación única, para seguirlas y rastrearlas a lo largo de todo el proceso de desarrollo, desde la semilla hasta las fases finales de crecimiento.

Este sistema también permite realizar la verificación de existencias con mayor frecuencia y drásticamente más rápido (en torno a un -80%), ya que puede hacerse escaneando el tag directamente desde el vehículo que pasa por los campos.

El uso del Vivary Tag facilitó la gestión del crecimiento de múltiples variedades dentro del mismo campo, permitiendo el registro preciso de las plantas recolectadas y descartadas para cada tipo. La RFID también permitió rastrear los descartes y eliminar las plantas enfermas o muertas.

Otra ventaja de la etiqueta Vivary es su reutilización: puede utilizarse durante varias temporadas consecutivas.
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